El pasado 26 de Diciembre se conocieron públicamente, los resultados de la Prueba de Selección Universitaria (P.S.U.) correspondiente al proceso de admisión 2019. Como era de esperarse, la prueba no hizo sino confirmar las ya conocidas desigualdades que subyacen a todo nuestro sistema educacional.
Como ya hemos visto en años anteriores, los mejores puntajes fueron obtenidos por alumnos que proceden de colegios particulares pagados o particulares subvencionados, y que es perfectamente coherente con lo observado en mediciones previas. “Esas grandes brechas entre colegios privados y públicos las vemos también en el SIMCE. La PSU. tiene problemas, pero la gran desigualdad de aprendizaje tiene que ver con el sistema educativo”, dijo la Directora de Política Educativa de la fundación Educación 2020, Nicole Cisternas.
Al conocerse los puntajes de este proceso, el Rector Aldo Valle, vicepresidente del Consejo de Rectores de las Universidades Chilenas (Cruch), informó que el promedio de los puntajes de las pruebas de matemáticas y lenguaje en los colegios particulares alcanzó los 597 puntos, mientras que los particulares subvencionados alcanzaron 501 puntos en promedio; por su parte en los colegios municipales, el promedio alcanzó los 490 puntos. La diferencia entre los primeros y los últimos genera una brecha de 107 puntos, inferior a la del año pasado, pero aún demasiado alta.
También se conoció el resultado de los 20 colegios municipales a nivel nacional con los puntajes más altos, mostrando una mayor prevalencia de los colegios pertenecientes a la Región Metropolitana. Entre ellos destaca en primer lugar el Liceo Agusto D’Halmar de Ñuñoa, con un promedio de 690,1 puntos (Y el único Municipal en la lista general de los 10 colegios con mejores promedios) . En cuarto lugar aparece el Instituto Nacional con 647,1 puntos. En la lista aparecen dos liceos de Providencia: Liceo Carmela Carvajal, en quinto lugar, con 616,9 puntos, y Liceo José Victorino Lastarria, en la posición 18, con un promedio de 578,2 puntos.
Frente a esto, Nicole Cisternas criticó la importancia que se da a los colegios con mejores resultados en la PSU: “En la escuela se aprende a convivir, a respetar la diversidad, a aprender valores. Eso se pierde si solo estamos preocupados de preparar una prueba, son sistemas altamente competitivos. Este “descreme” de estudiantes con mejores resultados académicos no nos ha hecho bien y nos ha dejado como el segundo país más segregado a nivel mundial en educación. Es importante que empecemos a cuestionar que los mejores colegios son porque tuvieron mejores resultados PSU. Las notas son un indicador mucho más justo que la PSU porque reflejan el esfuerzo del estudiante, ese elemento demuestra ser mucho más exitoso en la universidad que el resultado obtenido en la PSU. Esperamos que la reforma que se haga en el sistema de admisión vaya en el criterio de mayor justicia.”
Semejante análisis parece frio cuando detrás de estos resultados hay sueños de jóvenes y familias que se esfuerzan por un futuro mejor. En la era de la información la educación será cada vez una herramienta más evidente de promoción social, por lo que carecer de ella en calidad y profundidad será una forma injusta de segregación. Injusta, porque finalmente no dependió de ellos optar por mejores oportunidades, sino del presupuesto familiar.
Nuestro sindicato se hace parte de esa voluntad de brindar educación de mejor calidad a nuestros alumnos, y este será un objetivo permanente y transversal para toda nuestra gestión, y en especial para este año que inicia.
Los alumnos, conocerán los resultados de sus postulaciones dentro de dos semanas. Mientras, transitan por la tierra media entre su vida en el colegio y un futuro quizás incierto e injusto para una parte importante de ellos.